Viviendo y aprendiendo

Imagen de Ciudadano P
Esta semana me salgo del guión de la mano de Multicoolty, que me ha hecho una entrevista “veraniega” (quien me lea desde Alemania entenderá el por qué de las comillas) para su blog sobre expatriados en Alemania.

Aquí os dejo el link a la entrevista, en inglés.
Los que prefiráis una versión cervantina, podéis seguir leyendo una tradución muy, muy libre de la misma (para los que ya me “conocéis”).

Ya que estamos, si tú también eres o has sido expatriada/o, cuéntame tu experiencia!

Ahí va.

  • Cuándo y por qué viniste a Alemania?
 Allá en 2004, recién licenciada, cuando el mundo todavía no hablaba de crisis y en mi país era impensable que el precio de la vivienda pudiese alguna vez desplomarse, Servidora recibió una oferta laboral para venir a Alemania, Pepa. Una oferta que no pude rechazar. Así fue como comenzó mi aventura germana. Se suponía que iba a ser por un par de años, pero una cosa llevó a la otra y diez años y tres ciudades más tarde (las mudanzas ni las cuento), aquí estoy, disfrutando de la vida en mi querido país adoptivo.

  • Cómo fue tu integración? Encontraste alguna dificultad? Hablabas el idioma?
Cuando llegué aquí tan solo podía chapurrear algo de inglés, de alemán, cero patatero. Para arreglarlo, me tiré de cabeza a la piscina yéndome a un piso compartido con alemanes. Mano de santo. En seis meses ya me defendía y a los dos años ya hablaba alemán. En el trabajo, tanto mi jefe (que poco o nada tenía que ver con Komander) como mis compañeros facilitaron muchísimo mi adaptación, preocupándose en todo momento de que estuviese bien y ayudándome en todo lo que hiciese falta.

Así que para mí integrarme en la sociedad alemana, lejos de una “dificultad”, fue un enorme placer. Creo que si eres respetuosa hacia sus formas y costumbres y te tomas el tiempo y el esfuerzo que lleva aprender su idioma, descubrirás que los alemanes son mucho más que su cliché.
 

  • Qué es lo que más te choca de Alemania (bueno y malo)?
Lo que más me choca positivamente es el inmenso civismo que muestran los alemanes, el respeto que profesan tanto hacia el individuo como hacia la sociedad en general (con la excepción, por supuesto, de mi vecino). Los alemanes son honestos y sinceros (a veces demasiado!) y esto es algo que valoro mucho!

Un efecto secundario de esta "rectitud" puede manifestarse en forma de "inflexibilidad". Normalmente no es un problema, pero a veces se vuelve ridículo. Mi ejemplo favorito: la carta de un restaurante ofrece "espagueti boloñesa" y "tallarines cabonara". Si lo que de verdad te apetece es espagueti carbonara... buena suerte!!!
 

  • Ha cambiado tu estilo de vida desde que viniste a Alemania? Si sí, cómo?
Totalmente. Pasé del horario español a comer a las 12:00, cenar a las 19:00. Ya tengo planes para 2015, mientras que en España posiblemente no sabría qué voy a hacer el viernes. De hecho, volver a España es ahora para mí un "shock cultural", que ha patrocinado el famoso post de la "alemanización". Por ejemplo, ahora, cuando sale el sol, dejo lo que sea que esté haciendo y entro en modo cangrejo. Lo primero es lo primero, que no se sabe cuándo vas a volver a verlo!

  • Puedes decirnos algún "error cultural" que hayas cometido en Alemania?
Si bien con el tiempo puede que los alemanes pasen a ser tus fieles amigos, esto desde luego no sucede de un día para otro. Cuando me mudé a mi primer apartamento, fui uno por uno tocando los 26 timbres de los 26 vecinos para anunciar mi llegada al edificio, a la ciudad y al país. Sin reparar en gastos informativos. Solo diré que no es así como funciona la cosa...

  •  Qué siginifica Multiculturalismo para ti?
Para mí multiculturalismo es sinónimo de enriquecimiento. Si bien una cultura distinta puede resultar difícil de asimilar y de adaptarse (créeme, integrarme en China fue una historia muy distinta), lo cierto es que la experiencia siempre es enriquecedora: poder trabajar con compañeros de distintas nacionalidades, tener amigos "de" y "en" muchísimos países distintos, sin olvidar a mis amigos y familia españoles y, cómo no, a mi querido Polanski.

Multiculturalismo es una forma de vida, por suerte, mi forma de vida. 


  • Recomendarías la experiencia?
No puedo más que recomendar cualquier experiencia internacional (no necesariamente tiene que durar 10 años!). Esta es mi cuarta vez viviendo en el extranjero, y cada país en el que he vivido me ha aportado mucho más de lo que pude imaginar.

Viviendo y aprendiendo. Siempre. 

La operación "Zeitung"

Sabes cuando, tras un día agotador deseando pillar la cama, te vas a dormir y no puedes por ese mosquito al que oyes pero que no ves? O cuando se te mete una pestaña en el ojo y no la encuentras? O el chirrido de la tiza en la pizarra? Pues lo que me está tocando a mi ahora mismo soberanamente las narices es algún vecino que ha decidido hacer de mi buzón su papelera particular.

Como lo oyes, la criatura (todavía sin identificar), tiene a bien pasarme todos los domingos su periódico. El de propaganda, no os penséis que me regala el New York Times. Y ya van meses! Que digo yo: qué le costará tirarlo al contenedor de papel, que está justo al lado de los buzones, supongo yo que para estos casos? Pues no, a mi buzón, pa fastidiar.

Si eres un ser racional, de sangre fría, sopesas: y qué más me da un periódico que dos? Cuánto más me cuesta echarlo al contenedor del papel? Pues pongámosle cinco segundos por domingo, oséase doscientos sesenta segundos al año, total, redondeando y tirando por lo alto, cinco minutos. Vale la pena cabrearse por algo que te supone cinco minutos al año? El ser racional, pero de sangre caliente, elegirá la respuesta visceral: sí. Tal que si te hubiesen abofeteado con guante y guante. Como si de una ofensa a tus ancestros se tratase.

Supongo que habréis deducido a cuál de las dos categorías pertenezco. Me lo estoy tomando como mi “quién mató a Kennedy” particular. Tengo que averiguar quién me pasa su periódico cueste lo que cueste y caiga quien caiga! En ello estoy, dedicada en cuerpo y alma a la operación “Zeitung”. Semanas llevo con Conan Doyle en la mesita de noche, para cenar, capítulo de CSI, planteándome muy seriamente comenzar a hacer guardias, instalar una cámara, un sensor, algo. A todo esto Polanski (de sangre fría), con el grito en el cielo (por mí, no por el vecino, que sería lo "lógico"...).

A punto estaba de liar la de Chacal, cuando el pasado domingo quiso la casualidad que me encontrase con el repartidor del periódico a la vuelta de comprar el pan. Se me encendió la bombilla. Subo corriendo, cojo un boli, espero un tiempo prudencial, me cercioro de que no hay vecinos mirando (para que no vean que estoy “de atar”) y uno por uno saco cada periódico, escribo la fila y la columna de su buzón en la portada y lo vuelvo a dejar donde estaba [esto hay que leerlo con risa maléfica de fondo]. Y a esperar...

Poco duró la espera: el mismo domingo por la tarde picó el anzuelo. Fila 2 columna 4 ya me había echado su periódico en mi buzón. Elemental, querida Servidora: el del buzón de al lado. Le escribo en la portada "Este es SU periódico"  y se lo echo en el buzón de vuelta. A ver si lo pilla!

Pues no, no lo pilla, con toda la alevosía y nocturnidad, increible pero cierto, el lunes por la tarde el periódico estaba de nuevo en mi buzón!! Será posible?! Indignación es poco! Me lío escalera arriba. Para razonar estaba yo! La suerte que tuvo es que no estaba, así que le dejé el periódico en la puerta junto con una cabeza de caballo. Bueno, quien dice cabeza de caballo dice post-it. Eso sí, igual de amenazante. 

Estamos a miércoles y cierto es que de momento parece que el post-it ha funcionado, porque el periódico no ha vuelto por mi buzón. Lo captará? Espero que sí, porque si no voy a tener que ir al plan C.

Plan C: alguna idea?